El tratamiento del esófago de Barrett comienza con la eliminación de la causa subyacente, que es el reflujo ácido, mediante opciones médicas o quirúrgicas. Una vez controlado el reflujo, se puede realizar una ablación por radiofrecuencia de manera endoscópica para eliminar el tejido enfermo. Este procedimiento no quirúrgico destruye las células anormales y promueve la regeneración de un revestimiento sano, reduciendo así el riesgo de cáncer.

 

Este procedimiento permite una recuperación rápida, con la regeneración de tejido sano en aproximadamente 8 a 12 semanas.

 

En nuestro centro, estamos especializados en ofrecer todos los tratamientos disponibles para el esófago de Barrett. La elección del tratamiento se basa en una evaluación detallada y personalizada, considerando la edad del paciente y la gravedad de la condición.